Cuando ocurre un accidente de tráfico y alguno de los vehículos no tenía la ITV pasada esto puede ocasionar algunos contratiempos que explicaremos a continuación.
Accidente de tráfico y el principio de reparación íntegra del daño
Cuando ocurre un accidente de tráfico, uno de los principios fundamentales que rigen la indemnización de las víctimas es el de la reparación íntegra del daño. Este principio busca que la persona afectada reciba una compensación adecuada que cubra todos los perjuicios sufridos a causa del accidente, ya sean físicos, psicológicos, materiales o económicos. Por lo tanto, el hecho de tener la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) pasada o no, a priori, no debería suponer ningún problema para cobrar la indemnización.
No obstante, en la práctica surgen ciertas complicaciones cuando el vehículo implicado en el accidente no cuenta con la ITV al día. ¿Cómo afecta esto a la indemnización? Vamos a analizarlo a fondo.
Consecuencias de un accidente con la ITV caducada
La ITV es un requisito legal en España que asegura que los vehículos cumplen con las condiciones mínimas de seguridad y emisiones contaminantes. Conducir con la ITV caducada es una infracción que puede acarrear sanciones administrativas, pero, ¿qué ocurre si se sufre un accidente de tráfico en estas circunstancias?
Primero, es importante destacar que la falta de la ITV no invalida automáticamente el derecho a recibir una indemnización por los daños sufridos en un accidente de tráfico. Sin embargo, sí puede complicar el proceso. A continuación, desglosamos los posibles escenarios:
Determinación de responsabilidad
La clave para la indemnización en cualquier accidente de tráfico es la determinación de la responsabilidad. Si el accidente fue causado por el conductor del vehículo con la ITV caducada, la aseguradora podría argumentar que el estado del vehículo influyó en la ocurrencia del siniestro.
En tal caso, la compañía de seguros podría intentar reducir la cuantía de la indemnización o, en situaciones extremas, negarse a cubrir ciertos daños.
Por otro lado, si la culpa del accidente recae sobre el otro conductor, la situación de la ITV caducada del vehículo no debería afectar a la indemnización que corresponde a las víctimas. No obstante, el conductor del vehículo con la ITV caducada podría enfrentarse a sanciones administrativas adicionales.
Negligencia y agravamiento del daño
Otra consideración es si la ITV caducada puede interpretarse como una negligencia que agrava los daños. Por ejemplo, si el vehículo tenía defectos graves que podrían haber sido detectados y corregidos en una revisión de ITV, y estos defectos contribuyeron al accidente o aumentaron la gravedad de las lesiones, la aseguradora puede utilizar este argumento para ajustar la indemnización.
Sanciones administrativas
Independientemente del proceso de indemnización, conducir con la ITV caducada es una infracción que puede resultar en multas y la inmovilización del vehículo. Estos aspectos no influyen directamente en la indemnización por los daños del accidente, pero sí representan una complicación adicional para el conductor.
Protección del tercero perjudicado
Es fundamental recordar que la legislación española protege a los terceros perjudicados en accidentes de tráfico, incluso cuando el vehículo responsable no tiene la ITV en regla. El Consorcio de Compensación de Seguros puede intervenir para garantizar que las víctimas reciban la indemnización correspondiente, aunque luego reclamará esos costes al responsable del accidente.
Opinión de José Manuel Cuerva, titular de Exígelo Abogados
Como abogado especializado en accidentes de tráfico, he visto numerosos casos de accidente y en todos ellos las aseguradoras siempre persiguen un mismo objetivo: pagar lo menos posible.
En primer lugar, quiero enfatizar que cada caso es único y debe ser analizado en detalle. Aunque la ITV caducada puede complicar la situación, no es una barrera insalvable para obtener una indemnización justa. La clave está en demostrar que la falta de ITV no fue un factor determinante en la ocurrencia del accidente.
Además, es crucial contar con un abogado especializado que pueda manejar estas complicaciones y negociar eficazmente con las aseguradoras. En Exígelo Abogados, nos dedicamos a proteger los derechos de las víctimas de accidentes de tráfico, asegurándonos de que reciban la reparación íntegra del daño.
En resumen, aunque tener la ITV caducada puede añadir un nivel de complejidad a una reclamación de indemnización por accidente de tráfico, no es un obstáculo insuperable. Con el asesoramiento adecuado y una estrategia legal bien planteada, es posible lograr una buena indemnización. En Exígelo Abogados, estamos aquí para ayudarte en cada paso.